Algunas personas tienen como creencia que el sexo deja de ser un tema de interés y pasa a un segundo plano en las personas maduras o de la tercera edad. Esto es falso. Llegar a los 60 ó 65 años, no significa que la función sexual en la pareja se acabó. Por el contrario, para muchos esta etapa es perfecta para disfrutar plenamente las caricias, besos y abrazos, que anteceden un encuentro íntimo.
Rouzine Mubayed, doctora especialista en sexología del hospital Clínico, explica que todo ser humano necesita ejercer la función sexual, y que está no solamente se resume al coito sino por el contrario al arte de aprender a vivir cada momento de acuerdo a la edad que se tenga. “La edad no interfiere para nada en la función sexual, en todo caso existirían ciertas limitaciones en el hombre y la mujer producidas por enfermedades metabólicas, cardiacas, diabetes, hipertensión, prostáticas o del útero”.
Resalta que en algunos casos sucede que la mujer cuando entra en edad madura, se satisface más por estar en la etapa de la menopausia, pues ya no tiene que preocuparse por quedar embarazada. “En cada persona la reacción es distinta, para algunas mujeres con la menopausia sienten que disfrutan más los orgasmos y su deseo al igual que la frecuencia sexual aumentan y comienzan a exigir más”.
Por lo general, cuando esto ocurre en el hombre cae la frecuencia sexual, porque observa que las erecciones no son buenas o disminuye el apetito sexual. “Al hombre siempre le preocupa la erección y piensa que si no las tiene el resto de su cuerpo no sirve para nada”.
Mantener el equilibrio
La especialista afirma que la mejor manera de mantener una función sexual sana está estrechamente asociada con las condiciones físicas, cognitivas y emocionales de cada ser humano. "A medida que avanzamos en edad, debemos aprender a aceptarnos con los cambios que se producen. Las personas mayores al igual que un jovencito tienen derecho a disfrutar del sexo”.
Indica que sin importar la edad o la enfermedad que se padezca, siempre hay maneras de enseñar a la pareja a tener una vida sexual satisfactoria. “Por esta razón, resulta tan importante la consulta con un especialista pues será una guía en como pueden aprender a disfrutar sin correr riesgos”. Es tan sencillo como que todos tenemos derecho a comer. Unos a causa de algunas enfermedades no podemos agregarle sal o algún condimento extra, pero siempre encontramos la forma de darle sazón al plato para comerlo con ganas.
Maneras de disfrutar
Tanto las mujeres como los hombres maduros, experimentan algunos cambios que son normales en esta etapa. En el sexo femenino los estrógenos presentan un descenso que se refleja en la lubricación vaginal, en la intensidad de los orgasmos y en la elasticidad de la vagina, mientras que en el hombre se produce una disminución de la hormona testosterona y sus erecciones.
Mubayed explica que todas estas situaciones son normales y dependiendo como sean asumidas la pareja funcionará en la intimidad. “Si la persona se siente bien consigo mismo, debe responder sexualmente siempre que exista un estímulo”.
Comenta que de repente al hombre a esta edad le gusta más tocar y acariciar a su pareja, pero también puede suceder que en busca de solucionar la falta de erección se buscan parejas jóvenes para saber si van a poder funcionar. “La clave está en conocerse a sí mismo, aceptar las etapas de la vida y disfrutarlas de una forma adecuada”.
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