viernes, 3 de febrero de 2012

Guerras monetarias y energéticas del imperio

Guerras monetarias y energéticas del imperio
x Alberto Rabilotta   
Gaddafi había propuesto la creación de una moneda africana para los intercambios comerciales del continente, pero la OTAN y los cipayos libios lo impidieron

La ya endémicamente peligrosa coyuntura en el Oriente Medio se agravó esta semana con la adopción por la Unión Europea (UE) del embargo sobre las compras del petróleo y petroquímicos iraníes, compañadas por otra tanda de sanciones contra el banco central iraní. Cuando aun no se cumple el primer aniversario de los bombardeos de la OTAN para cambiar el régimen en Libia y se ven signos de una guerra civil con los combates entre las facciones “revolucionarias” y los ataques de los simpatizantes del derrocado Muammar el Gadafi, los mismos gobernantes de Estados Unidos (EE.UU.), Francia, Gran Bretaña y otros países de la UE que reclamaron una acción rápida contra el gobierno de Trípoli están exhortando ahora a acciones militares contra Siria e Irán.

Todo esto en el contexto de la grave crisis financiera y económica que azota a la UE, con sus secuelas de desempleo y empobrecimiento masivo, y que va camino de convertirse en una “guerra monetaria” por los niveles estratosféricos de endeudamiento de Estados occidentales, en particular de EE.UU., que financia su endeudamiento gracias a la primacía del billete verde como moneda de reserva y de pago para las transacciones comerciales mundiales.

Muchos países ya están buscando una alternativa al dólar estadounidense porque es evidente que con el altísimo nivel de endeudamiento de EE.UU. esa divisa carece de un respaldo sólido a mediano y largo plazo, y por lo tanto no es una divisa de reserva confiable. Hasta el FMI planteó, hace menos de un año, que era necesario buscar una alternativa al dólar. Otros países quieren una alternativa al dólar para liberarse de las presiones y sanciones de Washington y sus aliados europeos, y para poder corregir las distorsiones en los términos de intercambio que actualmente provoca el uso casi exclusivo del dólar para el comercio mundial de materias primas.

Billete verde y oro negro

El analista brasileño Pepe Escobar, que desde hace años viene cubriendo la lucha de intereses imperialistas en los países claves por sus riquezas en hidrocarburos o porque son el tránsito ideal u obligado de los ductos para transportar el petróleo o el gas natural a los mercados occidentales, escribía a mediados de enero (The Myth of “Isolated” Irán, atimes.com y tomdispacht.com) que la “línea roja” en la crisis iraní no es la cuestión nuclear, sino el petróleo y los petrodólares.

Washington y sus aliados europeos quieren provocar un cambio de régimen en Irán – país que cuenta con más del 12 por ciento de las reservas globales de hidrocarburos - para lo cual han lanzado una guerra monetaria destinada a provocar una “megadevaluación” del rial iraní mediante las sanciones decididas por el Congreso estadounidense en diciembre pasado a los bancos y empresas que hagan transacciones con el Banco Central Iraní.

Esta política, según Escobar y otros analistas, no tendrá necesariamente los resultados esperados, porque esas agresiones apuntalarán la política de “sustitución de importaciones” (que tanto sirvió en el pasado y sigue sirviendo en el presente en muchos países sudamericanos), lo que generará empleos, facilitará la exportación de productos iraníes que no son del ramo petrolero y consolidará en el mercado iraní la predominancia de China como proveedor de bienes industriales y de alta tecnología.

Irán no está tan aislado como Washington quisiera. El gasoducto Irán-Pakistán – recuerda Escobar - está en marcha y el primer ministro paquistaní Yusuf Gilani visita con frecuencia Teherán. El presidente afgano Hamid Karzay afirmó que quiere estrechar los lazos con Irán, y hasta las autoridades de Turquía, país que actúa como punta de lanza contra el gobierno sirio en estos momentos, han “señalado su rechazo a más sanciones de EE.UU. contra el petróleo iraní”, porque Turquía quiere que ser el país por el cual pase el gasoducto que “algún día” llevará el gas iraní a Europa.

Los analistas latinoamericanos, que no están sujetos al filtro mediático europeo o estadounidense, saben que la reciente gira del presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad por varios países de América latina, una región donde si alguien está aislado es Washington, fue exitosa. Y en Asia, donde están los principales clientes del petroleo iraní, Teherán cuenta con al menos dos compradores fieles - India y China - que ya rechazaron participar en esa “guerra económica” lanzada por Washington y la UE.

Oro negro sin billete verde

Beijing ya está comprando petróleo con yuanes en otros países, y negociando compras futuras de crudo con su moneda en nada menos que Catar, ese pequeñísimo país del Golfo Pérsico gobernado por una monarquía absoluta que defiende absolutamente la introducción por la fuerza de “la democracia de la OTAN” en países que están lejos de sus fronteras, como Siria y Libia.

El embajador M. K. Bhadrakumar, ex diplomático de India que tuvo puestos en la ex Unión Soviética, Corea del Sur, Turquía y varios países asiáticos, y escribe regularmente en Asia Times, analiza esta semana la reciente visita que el primer Ministro chino Wen Jiabao efectuó a Catar, y sus declaraciones a la prensa. Wen Jiabao dijo que su país quiere invertir en Catar para producir petroquímicos, para lo cual Beijing y Doha invertirán conjuntamente en la construcción de una refinería en China. Y también informó de que empresas chinas quieren participar en los “proyectos de infraestructura en Catar”, y que en lo tocante al gas natural ambos países están en discusión sobre “una cooperación a largo plazo, estable y exhaustiva”.

Y como subraya Bhadrakumar, el primer ministro chino dejó la sorpresa para el final, cuando se refirió a “otro punto importante”: “A fin de encarar temas de inversión, nosotros [China y Catar] necesitamos apoyo financiero. Por lo tanto llegamos a otro acuerdo, un acuerdo de cooperación que vincula las finanzas con la inversión. Catar también propuso el uso de moneda local en los pagos comerciales e incluso una tasa específica. Pienso que esta propuesta se puede estudiar”.

Unos días antes, recuerda el ex Embajador y analista, el primer ministro chino firmó un acuerdo de intercambio monetario entre su país y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) por un monto equivalente a cinco mil 500 millones de dólares. Este “swap”, según la declaración del banco central de China, apunta a “fortalecer la cooperación financiera bilateral, promover el comercio y las inversiones y conjuntamente salvaguardar la estabilidad financiera regional”.

Al hablar frente a una “cumbre energética en los EAU, Wen lanzó la propuesta de crear un organismo internacional que tenga el mandato de determinar el precio del petróleo y que regularía las políticas de toda la cadena de suministro involucrando a los países proveedores, los consumidores e incluso los países de tránsito”, agrega el ex Embajador Bhadrakumar.

La introducción del yuan, el euro, la libra, el rublo y otras divisas, e incluso la propuesta de crear una “canasta” de divisas en el comercio petrolero para terminar con la “tiranía del dólar estadounidense”, es una vieja aspiración de gobernantes que en algunos casos, como escribe Pepe Escobar, terminaron siendo derrocados por intervenciones militares: En el 2000 “Saddam Hussein abandonó el dólar como la divisa para las transacciones del petróleo que Irak exportaba” y tres años más tarde EE.UU. lanzó una guerra contra Irak para efectuar un “cambio de régimen”; Muammar el Gaddafi había propuesto la creación de una moneda para los intercambios comerciales del continente africano - el dinar oro -, y en marzo del 2011 “Francia, Gran Bretaña, EE.UU., Canadá, Catar y otros países de la OTAN invadieron a Libia”, para efectuar un “cambio de régimen”.

Por eso mismo, según Escobar, dejando de lado las nuevas sanciones contra el Banco Central Iraní que tardarán meses en ser aplicadas en su totalidad e ignorando las amenazas de cerrar el tráfico petrolero en el Estrecho de Ormuz – algo improbable porque es por ahí que sale la mayor parte del petróleo que Irán exporta -, quizás la “clave principal de la crisis montante en el Golfo Pérsico proviene de este movimiento para torpedear el petrodólar como la divisa para todo tipo de intercambios”.

Irán y Rusia ya utilizan sus divisas nacionales para realizar el comercio bilateral. India acordó con Irán que los pagos por las importaciones de petróleo iraní – que suman entre 12 y 14 mil millones de dólares anuales – serán efectuados en rupias indias y que posteriormente se convertirían en una moneda denominada de manera separada. Una fuente israelí cercana a los servicios de inteligencia (DEBKAfile) afirmó esta semana que Irán e India están negociando el pago en oro como alternativa.

Lo que ex Embajador Bhadrakumar subraya es que mientras Rusia e India tienen posiciones no subordinadas a EE.UU., este no es el caso de los EAU y Catar, monarquías que constituyen piezas claves de la estrategia occidental en el Oriente Medio y un vital apuntalamiento para el reciclado de los petrodólares.

El gobierno chino “está posicionándose en medio de la línea divisoria” y fortaleciendo sus intereses en ambas riberas del Golfo Pérsico, lo cual “abre un fantástico panorama de cooperación entre China y el Consejo de Cooperación del Golfo” (CCG), comenta el ex Embajador Bhadrakumar, quien agrega que la utilización del yuan y de las divisas de los países del Golfo Pérsico en los intercambios bilaterales crea “una nueva matriz” que permite avizorar el reemplazo del dólar estadounidense como la moneda de intercambio en el comercio petrolero con los países asiáticos.

En un artículo titulado “Europe at war with Iran” Pepe Escobar recuerda que nada menos que la gigantesca petrolera británica British Petroleum (BP) ha pedido al gobierno de Barack Obama ser exceptuada del sistema de sanciones contra Irán para no comprometer el desarrollo del yacimiento gasífero Shah Deniz II en Azerbaiyán, que tiene un costo de 22 mil millones de dólares y alimentará el proyectado gasoducto Nabucco, diseñado para alimentar a la UE con el gas del Mar de Caspio evitando el transito por Rusia, país que actualmente es el principal abastecedor de gas natural de muchos países de la UE.

Y añadiendo que Irán tiene una participación en este proyecto que le permite bloquearlo, Escobar ironiza sobre la “situación pos-surrealista” de la gigantesca petrolera británica BP “implorando a EE.UU. que la exceptúe de sanciones porque de otra manera se pondrá en riesgo la seguridad energética de Europa”

China, Rusia, India, Japón y otros países, entre ellos muchos de América latina, están tejiendo una serie de acuerdos bilaterales para negociar con sus propias monedas que –según Escobar –, se convertirá inexorablemente en un asunto multilateral, lo que significa que el billete verde irá lentamente siendo desplazado como la divisa de reserva a nivel mundial, “con todas las consecuencias sísmicas que esto implica”.

[Vídeo] Jorge Beinstein habla sobre la economía y la sociedad


Capítulo de la Videoteca de Pensamiento Marxista. El economista argentino Jorge Beinstein, cuya trayectoria de investigación incluye temas como la crisis y la relación entre la economía y el desarrollo cultural bajo el capitalismo, expone sencilla y amenamente la relación entre la sociedad y la economía bajo el modo de producción capitalista.
La Videoteca de Pensamiento Marxista es un proyecto para profundizar, debatir y socializar el pensamiento marxista. Hasta la fecha se han producido capítulos de la Videoteca con Armando Bartra, Reinaldo Carcanholo, Ana Esther Ceceña e Iñaki Gil de San Vicente entre otros. www.videotecamarxista.blogspot.com ywww.videotecamarxista.blip.tv.

jueves, 2 de febrero de 2012

Hugo Chávez: Estaré siempre con ustedes hasta que el cuerpo aguante

Hugo Chávez: Estaré siempre con ustedes hasta que el cuerpo aguante

El mandatario nacional agradeció la labor de todos los ministros del Gobierno Bolivariano. “Y cómo los atacan. Mientras más cerca estén de mí, más serán atacados”

“Una revolución no puede depender de un hombre, sería muy frágil. Yo haré mi papel hasta que Dios quiera y hasta que ustedes manden. Estaré siempre con ustedes hasta que el cuerpo aguante”, expresó este jueves el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez.

Durante un acto realizado en Catia, en Caracas, Chávezagradeció la labor de todos los ministros del Gobierno Bolivariano. “Y cómo los atacan. Mientras más cerca estén de mí, más serán atacados (…) Los mismo pasa con los camaradas de la Fuerza Armada”, expresó.

Chávez sentenció que en Venezuela se acabaron los militares subordinados a la burguesía, los traidores. Ahora están subordinados al mandato del pueblo, agregó.

“Aquí están los ministros y ministras del pueblo, y por eso nos atacan, dijo el Presidente.

Sentenció que a los burgueses les queda grande el Pueblo.

Así mismo, indicó que las políticas del gobierno de Carlos Andrés Pérez empobrecieron al pueblo, lo que desembocó en el Caracazo. Además, dijo que, pese a este suceso, las decisiones neoliberales se recrudecieron contra el pueblo. Por eso fue necesario el 4 de febrero de 1992, aseveró Chávez

Proponen reducir jornada laboral a 7 horas


Antonio Espinoza Prieto
Caracas, (RDTV) – El miembro y asesor de la Comisión Presidencial, Antonio Espinoza Prieto, cuya tarea es redactar la reforma a la nueva Ley Orgánica del Trabajo informó que una de las propuestas es la reducción de la jornada laboral a siete horas en vez de las ocho horas diarias vigentes, según información de primera hora del portal web del diario últimas Noticias.

La idea es que se trabajen legalmente 35 horas a la semana en la jornada diurna, mientras la nocturna pasaría a seis horas y media diaria, con 32 horas y media a la semana.

De la misma manera, se analiza que el período de prueba de un trabajador en las empresas no pase de 30 días, en vez de tres meses vigentes.

“Pienso que los trabajadores le temen a la reducción de la jornada porque reduce la posibilidad de horas extras”, afirmó.

Explicó que en Venezuela quizás “por falta de cultura laboral, los trabajadores laboran las horas extras que pueden, y se disgutan cuando les quitan esas remuneraciones extraordinarias”.

Acotó que “eso realmente es una incultura laboral que afecta la salud y vida del trabajador”.
En relación con la intervención del Consejo Nacional Electoral, se le comentó que las propuestas de los trabajadores se inclinan a que ese organismo no regule las elecciones sindicales o que sólo intervenga cuando una organización sindical lo solicite.

Espinoza señaló que la libertad sindical está contemplada en la Constitución: “Esos artículos prácticamente reproducen las disposiciones de convenios de la OIT”.

“Todos parten de la idea de la autonomía de la organización sindical”, dijo.

En cuanto al tema de las prestaciones, dijo que sigue en pie la misma propuesta: retomar el viejo esquema con el cálculo retroactivo y salarizar los días que se pagan con el régimen actual.

Fuente : xborges@cadena-capriles.com
www.ultimasnoticias.com.ve

Stedile: "El poder económico es el que determina el poder político"


Stedile: "El poder económico es el que determina el poder político"
x Juan Manuel Karg 
En el marco del Foro Social Mundial que se realizó en Brasil, "Marcha" entrevistó a Joao Pedro Stedile, dirigente del Movimiento de Trabajadores sin Tierra

Impulsando el ALBA de los Pueblos. Desde Porto Alegre.

-¿Cual es la importancia del Foro Social de Porto Alegre en la coyuntura de crisis internacional actual?

El Foro Social Mundial, ahora el Tematico acá en Porto Alegre, y los otros que se desarrollaron en otras partes del mundo, siempre son espacios muy importantes para que la gente venga y comparta sus ideas. Entonces el Foro, más que un espacio organizativo, es una verdadera feria ideológica donde las personas vienen, comparten sus preocupaciones y reflexiones. Aquí ubicamos a quiénes son parecidos, para entonces articular cosas concretas de luchas de masas, de propuestas concretas que pueden entonces entrelazar de manera directa a los movimientos sociales de todas partes del mundo, en sus luchas contra el gran enemigo que tenemos en este periodo histórico que son la grandes empresas capitalistas.

-Cómo se para América Latina frente a la coyuntura actual, y cual es la importancia del ALBA como proyecto que retoma la idea de construir otro tipo de sociedades, más justas, más humanas?
Acá en Latinoamérica estamos enfrentando una disputa permanente entre tres proyectos, que se agudiza incluso frente a la crisis.

Hay un primer proyecto que es la recolonización de nuestro continente, defendido por EEUU y que tiene sus laderos en algunos gobiernos como Colombia, como Chile, que nos quieren imponer como un terrtorio para que el Capital venga aquí y pueda apoderarse de los bienes naturales. Sólo quieren que nosotros produzcamos mercancías, materias primas para ellos.

Hay un segundo proyecto que defiende la idea de una espacie de integración latinoamericana pero bajo los intereses de las burguesías locales, donde ellos desarrollan proyectos de integración, de transporte, de libre comercio. Tienen contradicciones con el Imperio, pero no ayudan a resolver los problemas de los pobres.

Y el ALBA se ha constituido como el tercer proyecto, que es más allá que un acuerdo comercial entre gobiernos o Estados. Es una propuesta política que tiene como perspectiva una integración popular entre todos los pueblos de Latinoamérica, sin términos económicos, sin términos políticos, para hacer frente al Imperialismo y a las transnacionales.

Sin términos culturales, incluso, porque nuestros pueblos tienen las mismas experiencias, tienen las mismas formaciones socio-culturales. Entonces los movimientos sociales más combativos de Latinoamérica, aparte de los gobiernos, estamos impulsando ese proyecto ALBA, como una forma de integración popular, una unidad latinoamericana que pueda acumular fuerzas para derrotar a las empresas transnacionales, al proyecto del Imperialismo y avanzar hacia el Socialismo.

El problema es que con esta crisis internacional tenemos una contradicción fundamental que es que el poder económico es el que determina el poder político. Y el poder económico se desarrolló como el capitalismo internacional, bajo el control de los bancos y de las empresas transnacionales, y los gobiernos locales nacionales no tienen fuerzas para encuadrar a ese capital que hace lo que quiere, entonces los gobiernos se van a reunir, pueden sacar bonitos documentos como las Naciones Unidas, pero…¿qué pasa?. Que la fuerza económica que domina la economía, que domina los países, no respeta esos acuerdos internacionales.

Entonces sólo es posible enfrentar a ese capital si los movimientos sociales de todos los países logran hacer manifestaciones, logran desarrollar una conciencia en la sociedad para acumular fuerzas y enfrentar a esas empresas capitalistas. Y ojalá muchos de los gobiernos que vengan a Río puedan sumarse y también defender los puntos de vista de sus poblaciones, porque solos los gobiernos no tienen fuerza. La crisis de Europa está ahí, nos da argumentos todos los días de cómo los bancos incluso están indicando a los mismos gobernantes.

-Durante tu intervención en el Foro mencionaste la importancia de los medios masivos de comunicación para difundir la ideología dominante. Como se deben parar los medios contrahegemónicos en esa coyuntura?

En el período del capitalismo industrial la burguesía reproducía su ideología con la Iglesia, los partidos políticos y las escuelas. Ahora, en esta etapa del neoliberalismo, del capital financiero, del capitalismo globalizado, la forma de la burguesía, de la clase dominante, de reproducir su ideología en la sociedad es la televisión y por eso ellos mantienen un monopolio en todos nuestros países.

Por eso, como movimientos sociales nosotros siempre llevamos esa reflexión. Hay que denunciar la concentración del poder ideológico que la burguesía tiene con los medios televisivos, y a la vez la izquierda y los movimientos sociales tienen que apoderarse de ese instrumento. Por eso nos alegra mucho que precisamente acá, en Latinoamérica, se están desarrollando experiencias muy importantes como Alba TV, como TeleSur. Y en algunos de nuestros países hay televisoras públicas que han asumido un rol progresista. Todo eso es muy importante, justamente para romper el monopolio que el capital impone a las televisoras. Por eso, un gran abrazo a todos ustedes que están trabajando en ese proyecto. Además de ayudarnos a enfrentar el capital, Alba TV nos ayuda a construir aquel proyecto al que me refería de una integración popular entre nuestros pueblos de Latinoamérica.

Chao CIADI, un paso correcto

Chao CIADI, un paso correcto
x Modesto Emilio Guerrero 
Venezuela sale del Centro de Arreglo de Controversia sobre Inversiones, dedicado a procesar demandas millonarias de empresas multinacionales contra los Estados

La correcta decisión gubernamental de Miraflores, de zafarse del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones, conocido por sus siglas en inglés como CIADI, tiene dos valores, uno concreto y otro simbólico, ambos de alto significado hoy.

Con el primero o coyuntural, el Estado nación bolivariano deja de estar sometido a un organismo del sistema mundial de Estados dominantes, mediante uno de sus instrumentos, el Banco Mundial, siempre diigido por algunos de sus personeros y estructurado con un solo objetivo: proteger el régimen de inversiones de las empresas transnacionales en el mundo. No fue casual su fecha de nacimiento, 1965, año clave de una etapa mundial de cuestionamientos y desafíos políticos y estatales (rebeliones, revoluciones anti coloniales y cambios nacionalistas) al régimen de inversiones imperiales, sus empresas y Estados sede, en África, América latina y Asia.

Desde esta acción Venezuela es más independiente como Estado, sociedad, régimen y gobierno, o para ser dialéctico, menos dependiente. La independencia total o integral sólo será posible cuando una estructura económica y estatal no capitalista reemplace a lo que hoy domina en nuestro país. Mientras, medidas como desprenderse del CIADI refuerzan la independencia, pero siempre en términos relativos, subordinados a una fuerza superior, el dominio capitalista mundial y su expresión en el Estado y la economía venezolana. Es simple: lo que nos ahorramos al rechazar cobros del CIADI, lo obtendrán por otras vías de la estructura mundial de poder del sistema del capital. De eso no podemos escapar con acciones aisladas, así sean valientes como la de renunciar al CIADI. Se parece a la lucha contra la deuda externa.

El valor simbólico tiene similar valor en el actual contexto geopolítico. Sirve para mostrar al mundo y sobre todo a los pueblos latinoamericanos, que se puede vivir sin el CIADI, que la idea colonizante instalada en los gobiernos del continente, con la excepción de Ecuador, Bolivia, Cuba y algún otro Estado de menor fuerza, es que se debe convivir, compatrir y subordinarse a esos organismos. Incluso cuando los discursos oficiales proclaman lo contrario, como los casos de Argentina, Brasil, México o Uruguay. Ese mismo valor simbólico es solidario, correspondiente, con la resistencia de Bolivia y Ecuador a las esquilmaciones del CIADI desde 2007. Sirve moral y políticamente a esos Estados y pueblos. Y en tercer lugar, señala que el carácter altamente contradictorio de la política exterior venezolana durante los últimos dos o tres años, sobre todo desde finales del 2010, tiene límites. La inevitable presión imperialista, la debilidad estructural del país en la economía mundial, la relación de fuerzas políticas en la sociedad, el carácter altamente revolucionario de su amplia y compleja vanguardia bolivariana, condicionan el curso de cualquier retroceso. Lo hacen más contradictorio y lo limitan.

Para ayudar a comprender el valor de esta medida gubernamental contra un organismo imperial, rescato un trabajo sobre el origen, carácter y función imperialista del CIADI, publicado hace pocos meses.

A qué cosa renunciamos

Como si se tratara de una conspiración financiera internacional o de una nueva "crisis" de la deuda externa, varios países latinoamericanos viven en vilo por los fallos del tribunal internacional del CIADI. 

Llama la atención que los más agredidos por este organismo judicial del Banco Mundial son los gobiernos remisos al control imperialista, considerados "progresistas", o de centro izqueirda". 

Venezuela, Argentina, Ecuador, y Bolivia son los cuatro más demandados por las multinacionales en el CIADI.

Desde hace casi una década, varios países latinoamericanos y muchos del tercer mundo viven pendientes de los juicios de un tribunal internacional conocido como Centro Internacional de Arreglo de Controversia sobre Inversiones (Ciadi), dedicado a procesar demandas millonarias de empresas multinacionales contra los Estados.

Argentina, Bolivia, Ecuador, Venezuela y México acumulan facturas por unos 80.000 millones de dólares en juicios por decisiones gubernamentales que afectaron in­­versiones radicadas en sus economías. Esta suma escala a casi 200.000 millones de dólares si ampliamos el mapa de juicios a los más de 60 paí­ses de América latina, Asia y África que esperan sentencia en el Ciadi.

Esta entidad fue fundada en 1965 para proteger las inversiones externas directas mediante Tratados de Protección. “Las demandas solamente pueden ser planteadas por empresas contra Estados y no al revés. No hay una instancia superior, en consecuencia, las decisiones del Ciadi son inapelables e irrevisables”, señaló en 2007 el economista belga Alan Goods, motivado por la denuncia del Ciadi que hicieron tres Estados de la Alianza Bolivariana de las Américas, Alba. Según datos del sitio especializado en deuda externa con sede en Bruselas cadtm.org, de las 252 sentencias emitidas hasta 2009, un total de 250 las perdieron los Estados.

Una revisión de los documentos de esta entidad evidencia que la montaña de dinero a cobrar es el resultado de la cantidad de Tratados de Protección de Inversión firmados por cada país en las últimas dos décadas. El 72% de los juicios actuales figuran desde 1991, cuando el neoliberalismo campeaba por el mundo. En sus primeros 35 años de existencia se firmaron 602 Tratados de Protección de Inversiones entre Estados y empresas, mientras que en casi la mitad de ese lapso, 18 años, se triplicaron hasta llegar a los 1.857 Tratados (Sonia R. Jiménez, Unam, México 2009).

Hasta el año pasado, ciento cuarenta y siete países habían aceptado sus normas, pero actualmente varios gobiernos tratan de alejarse del Ciadi. Esta tendencia fue inaugurada por Bolivia y Ecuador entre 2007 y 2009, cuando ambos Estados renunciaron al organismo para no pagar las demandas millonarias a favor de empresas extranjeras afectadas por decisiones oficiales. Ecuador fue sentenciada a pagar 12.000 millones de dólares y Bolivia unos 4.000 millones. Desde entonces, otros cuatro países de nuestro continente, cinco del Medio Oriente y tres de Europa oriental intentan huir de este tribunal.
Guiados por las estadísticas del Ciadi/Banco Mundial, desde el año 1975 hasta 2011, su Tribunal Internacional de Controversias, con sede en Washington, juzgó y resolvió sobre 228 juicios contra 98 países. En 81 casos perdieron Estados de América latina y el Caribe, le siguió África negra con 45 resoluciones en contra, Asia con 34, los gobiernos del mundo árabe con 28 sentencias desfavorables; el resto de los juicios tuvieron que pagarlos nueve Estados europeos de la ex Urss, Turquía y los pequeños países de la lejana Asia.

La Argentina es la nación con más demandas en contra dentro de los tribunales del Ciadi. Un total de 58 causas desde el año 2002 en adelante por las que deberá sufragar alrededor de 20.000 millones de dólares, luego de negociar una rebaja de casi 30.000 millones en 2009.

En América latina le sigue Venezuela con 22 demandas a un costo aproximado de 42 mil millones de dólares en expedientes, más del total de sus reservas actuales (Dr. Luis Britto García, Aporrea, Caracas 18/01/11). Los tratados de inversión se pactan por alrededor de 10 años. Argentina estaría más presionada porque sus juicios comenzaron entre 2001 y 2003. Aunque en el país caribeño aparecieron casi todos entre 2007 y 2009, cuando se nacionalizaron y expropiaron más de 60 propiedades, el monto supera el doble de Argentina. En ambos casos la presión sobre sus reservas y finanzas será la misma.

La mayoría de las sentencias del Ciadi recaen sobre países latinoamericanos que pertenecen a la Unión de Naciones del Sur (Unasur) y al Alba, que sostienen políticas autónomas respecto de los principales organismos financieros internacionales. En este contexto, se justificaría la expresión del intelectual venezolano Lusi Brito García, quien calificó lo que hace el Ciadi, como un “golpe judicial”

El contexto internacional de las indignaciones mundiales (IV)

El contexto internacional de las indignaciones mundiales (IV)
x Eric Toussaint 
Algunos rasgos comunes en las movilizaciones de 2011

En 2011, todos los movimientos mencionados, de la primavera árabe a Occupy Wall Street, pasando por los Indignados, tenían varias características comunes:

1.- Reocuparon la plaza pública, incluso se instalaron, y también multiplicaron las manifestaciones en las calles. En el pasado, las acciones radicales comenzaban a menudo en el lugar de trabajo o de estudio, e implicaban la ocupación de instalaciones (fábricas, escuelas, universidades…) Aunque las huelgas y las ocupaciones de fábricas o de establecimientos escolares no hayan estado ausentes en algunos países como Egipto o Grecia, la forma de acción más extendida adoptada por los participantes en las acciones consistió en la recuperación del espacio público. Una parte importante de los manifestantes no tenían ni tienen la posibilidad de organizarse en los lugares de trabajo, debido, en particular, a la represión y a la atomización de los trabajadores. Un gran número de ellos no tiene empleo —y es una de las razones de su compromiso para la acción—, o debe contentarse con un empleo precario. Entre los manifestantes, en algunos países, hay un gran número de diplomados sin trabajo. En países como España, afectados fuertemente por la crisis inmobiliaria, o como Israel, donde la falta de vivienda para la gente modesta es clamorosa, las personas víctimas de esta crisis pueden estar muy bien representadas. Además de estas razones, la voluntad de ocupar la plaza pública tiene que ver, por supuesto, con la voluntad de reunirse, de ver cuántos son, de hacer una demostración de fuerza frente a un poder percibido en Túnez, en España, en Grecia, en Egipto (y para una buena parte de manifestantes en Estados Unidos) como completamente sordo a las necesidades y pedidos de la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas del país. La exigencia de una auténtica democracia está en el núcleo del movimiento.

2.- En varios países, la comunicación y la movilización vía las redes sociales (facebook, twitter, etc.) tuvo un papel importante aunque no hay que exagerar el fenómeno.

3.- La forma «asamblearia» del movimiento constituye una característica común. Con ese mismo espíritu, existe una reticencia, incluso claramente un rechazo, hacia la elección de delegados y delegadas. Se quiere la democracia directa y participativa.

4.- En varios países, la desobediencia cívica ha sido reivindicada y practicada sistemáticamente como un acto de resistencia frente a un poder totalitario —casos de Túnez y Egipto—, o frente a un poder autista (Grecia,…) que no duda en utilizar la represión para vaciar las plazas o impedir pura y simplemente las concentraciones, como es común en el caso de Estados Unidos. Estas manifestaciones están muy alejadas de las tradicionales, que parecían más procesiones que marchas de protesta. En cierta forma se ha producido un salto cualitativo. Mientras que hasta este momento, la ideología dominante y la represión habían conseguido individualizar, atomizar los comportamientos debido al miedo (a la represión, a perder su empleo, a perder su vivienda, a perder su derecho a una pensión, a perder sus ahorros…), la amplitud de la crisis y el hecho de que se haya llegado a una masa crítica de manifestantes permitió que muchas personas se sobrepusieran al aislamiento, principalmente con la idea de que, en realidad, no había mucho que perder. Para la mayoría de los participantes en el movimiento se trata del primer combate colectivo con una dimensión política.

5.- En la mayor parte de los casos, no ha habido una elaboración de un programa de reivindicaciones, incluso si las comisiones de trabajo del movimiento de los Indignados españoles produjeron propuestas y declaraciones. Respecto a esto, conviene subrayar la importancia de la declaración conjunta entre Puerta del Sol y Plaza Sintagma: Llamamiento Sol-Sintagma y que afirma especialmente: «No al pago de la deuda ilegítima. ¡Esta deuda no es nuestra! ¡No debemos nada, no vendemos nada, no pagaremos nada |1|!» En el caso de Túnez y Egipto, existe un acuerdo sobre una reivindicación central: la partida del dictador que se expresa en una exhortación muy clara: ¡Márchate!

6.- Los manifestantes no se agruparon de acuerdo a una base identitaria: etnia, religión, clase, generación u orientación política. La mezcla dominaba aunque algunas categorías entre los más explotados hayan estado subrepresentados, en algunos casos. La fórmula adoptada en Estados Unidos por Occupy Wall Street comenzó rápidamente a hacer la vuelta al mundo: «¡Somos el 99 %!».

Podríamos agregar una séptima característica común: en ningún caso, el Foro Social Mundial, el Foro Social Europeo, el Foro Social de las Américas constituyeron una referencia para los manifestantes. El término altermundialista o antiglobalización tampoco forman parte de sus referencias. Desde ese punto de vista, el ciclo abierto por el Foro Social Mundial en 2001 parece, indudablemente, haberse cerrado y otro ciclo se ha abierto, se verá hacia donde conducirá. Lo importante será participar.

Más allá de las características comunes, hay diferencias que saltan a la vista. En los países de África del Norte y del Cercano Oriente, los principales objetivos fueron los regímenes dictatoriales y los regímenes autoritarios, aunque la cuestión social estuviera bien presente y en la base del movimiento.

 En los países más industrializados, los objetivos son los banqueros y los gobiernos a su servicio. La defensa de los bienes comunes es un punto de convergencia. La cuestión social se expresa en el modo de rechazar el trabajo precario, las privatizaciones de los servicios públicos (educación, sanidad, etc.), en la necesidad de encontrar una solución al problema de la vivienda y de la deuda hipotecaria (particularmente en España y en Estados Unidos, país en el que hay que agregar la deuda de los estudiantes, que totaliza un billón de dólares), en el rechazo a pagar la crisis provocada por el 1 % enormemente rico.

En los países más industrializados, existe también una gran diferencia entre la radicalidad del movimiento en Grecia, que se acerca a una posible crisis prerrevolucionaria como la de Argentina 2001-2002, y la situación de España, y no digamos de Estados Unidos. Las diferentes historias de estos países y de sus movimientos sociales, el grado de implantación de los diversos partidos políticos de la izquierda dura que no han sido borrados por el movimiento nacido en 2011.—la izquierda radical griega incluyendo el partido comunista puede representar cerca del 25 al 30 % del electorado e influir en una parte importante del movimiento sindical; la situación es similar en Portugal, y por supuesto totalmente diferente en Estados Unidos—