Al presentar las cifras de desocupación, el Ministerio informó que Francia está cerca de superar la barrera de los 3 millones de inscritos (2.945.000) en la oficina de desempleo, tras sumar 23.700 nuevas inscripciones en el mes de junio.
Si se incluye en este índice a las personas que realizan tareas reducidas, y cuyos precarios ingresos son compensados con una retribución por parte del Estado, la cifra se estira a 4.670.000 personas con problemas laborales.
Considerando las distintas categorías, el desempleo se sitúa en el 10,2 por ciento, la cifra más alta desde 1999, mientras como consecuencia de los largos períodos de desempleo, tan solo el 48,8 por ciento de los desocupados recibe una indemnización por parte del Estado, informó el Ministerio.
Otro dato preocupante es que durante el último año se incrementó sustantivamente (un 15,8 por ciento) el número de nuevos desempleados mayores de 50 años.
Se estima que Pole Emploi (la dependencia pública que se ocupa de los desempleados) destinará este año 4.300 millones más de euros que el anterior, con lo que incrementará su pasivo a 15.000 millones.
La semana pasada, al rectificar el presupuesto 2012, el Parlamento -de mayoría socialista- decidió entregar 7.200 millones de euros adicionales a esa dependencia estatal.
Este anuncio tiene lugar en momentos en que el desempleo aumentó en Europa por séptimo mes consecutivo, según informó la consultora francesa Markit esta semana.
Mientras tanto, en su informe anual presentado hace 10 días, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico internacional (OCDE) estimó que el desempleo continuará creciendo en Europa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario