Pdvsa
La participación en la explotación petrolera de Pdvsa en la Cuarta República era solo de 35% a nivel nacional, los gobiernos de la Cuarta quería tumbar la renta petrolera para justificar la venta de Pdvsa y prueba de ello son los ministros y representantes de los gobiernos adeco-copeyanos quienes afirmaban que en la faja del Orinoco no existía petróleo, que lo que había era bitumen.
Durante la Cuarta República se violaba abiertamente la ley de hidrocarburos (aprobada en 1943), los impuestos estaban para las empresas extranjeras en 0% de las regalías en la Faja del Orinoco, se abatía la contribución fiscal petrolera, todo esto bajo la mirada cómplice de los muchos diputados que ahora son de oposición, pero cuando Luis Giusti, ex gerente de Pdvsa, quiso vender el 10% de la empresa para abrir la privatización de la misma, lo dijeron nada.
La empresa petrolera bajo un esquema de autonomía administrativa, política y financiera (solo del Estado venezolano) pasó a manos de empresarios extranjeros, al punto que todo el control de las operaciones (hasta las más pequeñas) eran controladas desde fuera del país por una compañía, cuyos accionistas pertenecieron o pertenecían la Agencia Central de Información CIA (por siglas en inglés).
La Pdvsa de entonces realizaba “operaciones” fuera del territorio nacional y en tal sentido los recursos no entraban al fisco nacional y los pocos que regresaban al país lo hacía a través del Banco Central de Venezuela, que también tenía plena independencia del Estado Venezolano, pero al igual que la petrolera nacional, estaba dominada por grandes emporios económicos internacionales.
Pdvsa, engordó sus nóminas, tanto en personal como en sueldos y salarios con la intención de hacer parecer que los gastos operativos de la empresa eran insostenibles y así allanar el camino hacia la privatización, bajo la eterna excusa que decía que los venezolanos no sabían hacer negocios ni manejar una industria petrolera, por lo tanto, había que dejarla en manos de los expertos decía Luis Giusti, entre otros.
Petróleos de Venezula se convirtió en la caja chica de muchas personas. Cada gerente poseía un jet privado, “por seguridad decían”, pues según no era conveniente que los gerentes viajaran juntos en un mismo avión, lo que permitió que estos aviones fueran utilizados para que los familiares y amigos de estos gerentes utilizaran estas naves para ir al exterior, no solo a pasear, sino a realizar las compras de la semana en supermercados de Miami.
Uno de los escándalos que pudo salir a la luz pública, fue el de la Madre de Leopoldo López, cuando ocupaba un alto cargo en la estatal petrolera, le otorgara 60.000.000 de bolívares provenientes de los fondos de Pdvsa, para financiar una fundación que presentó un proyecto llamado “Justicia y Paz”, pero los fondos fueron tomados para fundar el Partido Político Primero Justicia, donde milita Henrique Capriles Radonski.
La lista de negocios fraudulentos, de artimañas para no traer al país los pocos recursos generados por el negocio petrolero y las historias de malos manejos en todas las áreas, es tan grande que necesitaríamos miles de páginas para plasmarlos en blanco y negro.
En resumen y siguiendo las recomendaciones de José Toro Hardy y las de Luis Giusti, la Pdvas de la cuarta república era un mal negocio debido a que los venezolanos no tenían la capacidad para manejar tan grande negocio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario